Sinopsis: La extraña presencia de un monolito, indica los avances de la humanidad, desde que el ser humano solo era un primate, hasta los viajes espaciales.
Reparto: Keir Dullea, Gary Lockwood, William Sylvester, Daniel Ritcher, Leonard Rossiter
Director: Stanley Kubrick
Comentario del acomodador:
Es curioso pensar que esta obra maestra del cine, fuera rodada en 1968 un año antes de la llegada del hombre a la luna (sea o no cierta ésta, que no quiero entrar ni en polémicas ni conspiraciones), y que 46 años después sus efectos especiales sigan siendo mejores que la mayoría de las producciones modernas. Pero más allá de efectos, fotografía y demás zarandajas, 2001 es más que una película... mucho más, es una obra audiovisual completa, es ver una opera, es ver danza clásica, es ver un documental científico y es ir a la iglesia a que hable el mesías.
Su comienzo, exclusivamente sonoro, que durante minutos te hace salir del cuarto, habitación o cine, para adentrarte en un mundo diferente, en un espacio que convergen pasado y futuro, lo que puede ser o lo que fue, observar la danza de los objetos inertes, dejarte llevar por las miradas de los hombres que parecen máquinas y de la voz de las máquinas que parecen humanos. El gusto que tienes es que no es una película, es mucho más, es el mejor plato de la mesa, es el mejor menú del día, es en definitiva y simplemente inspiración pura.
Para ver esta película sería requisito indispensable vestir de etiqueta, pagar 100 euros por entrada y acompañarlo por una copa de Moet Chandon Imperial justo al terminar la obra y brindar por el hada o musa que visitó al excelentísimo Stanley Kubrick
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