Bienvenidos, bienvenidas queridos amigos amigas de cinefilia, veréis la película que vamos a reseñar hoy es el inicio del ciclo que le vamos a dedicar a uno de los directores míticos del cine un autor que no dejó indiferente a nadie y que con su estilo personal llegó a ser leyenda de este arte.
Para poder adentrarnos es su figura me veo en la obligación de reseñar primeramente esta película a la que no me duelen prendas en catalogarla como obra Maestra ya que estamos hablando de la magnifica EL TREN film rodado en 1964 por John Frankenheimer.
Pero el ciclo de cine que empezamos no es dedicado al portentoso y controvertido director de Queens si no al prodigioso Arthur Penn.
¿Y cómo para empezar el ciclo de cine dedicado a un director empezamos por una cinta dirigida por otro? pues por que como dice el dicho, la grandeza de un hombre no se mide por los triunfos obtenidos si no por sus fracasos superados y esta película titulada el Tren entra dentro de los fracasos del director, así que si quieres saber más de este hecho, que mejor que quedarte a ver esta videoreseña y consejo de cine.
Y ahora me van a permitir antes de empezar con la historia de esta producción que hablemos un poco de la trama, una de las más audaces de todo el cine bélico que se hizo en los 60 uno de esos films inmortales debido al guión, por lo que es imprescindible llegar sin saber más de lo necesario y libre de spoiler, pero estar tranquilos por que este canal está libre de ellos ya que es una norma establecida en CINEFILIA.
Pues lo dicho.
La película comienza con los maravillosos acordes de la melodía de Maurice Jarre, la fotografía de Woltitz y Tourniere y la puesta en escena virtuosa de Frankenheimer, sólo los primeros compases de la película te llevan a entender que lo que vas a ver se sale de lo común, la distorsión de la lente gran angular te da la sensación más de estar viendo una película de suspense que bélica y de pronto el museo, los cuadros que el tercer right llama arte degenerado, El Coronel Von Vadein admira ese arte y lo proteje, pero pronto adivinamos por que esa protección, Von Vadein tiene pensado llevarselos a Alemania antes de que lleguen los aliados, es entonces cuando la conservadora del museo se pone en contacto con la resistencia francesa con el fin de que su tesoro nacional no salga de Francia, es entonces cuando el inspector ferroviario Labiche miembro de la resistencia prepare un plan para que dicho tren no llegue a su destino y hasta aquí te voy a contar el resto de la trama tienes que verla tu en un film que te atrapa desde el minuto uno hasta el final. Una película llena de épica y esa magia de unos hombres dando su vida por un bien mayor
Y ahora volviendo a la historia de la producción y por que este film es el que inicia el ciclo de Arthur Penn. Veréis el director fue contratado para realizar la película debido a sus dos primeros lagometrajes, El zurdo opera prima del director rodada para la Warner y la que ya os adelantamos que será la siguiente película del director en ser reseñada en el canal, un western atipico al que dejaremos el desarrollo del mismo para la siguiente reseña y que le abrió las puertas de la United Artist para que sealizara El milagro de Anna Sulivan film ganador de dos Oscar que le puso en el candelero y uno de los films referentes del director. El caso que tras estos dos primeros films el estudio le dió la producción más importante que tenía entre manos una coproducción con Francia e Italia en donde iba a actuar la estrella del momento Burt Lancaster.
Ahora antes de adentrarnos sobre la producción de este film, dejenme un breve parentesis para preguntarte que si te gusta el cine, si quieres conocer o recordar esas películas maravillosas que han hecho de este arte lo que es hoy en día, ¿Por que no te suscribes a CINEFILIA? todas las semanas subimos dos reseñas de cine clasico e independiente de todos los géneros y épocas, donde te damos a conocer esas maravillosas obras que hacen de un día aburrido y que no sabes que ver una velada fantástica de cine, así que no te lo pienses más y dale al botñon y a la campanita y forma parte de nuestra familia de cinefilos.
Y bueno, El caso es que con el actor fichado y tras tres días de rodaje, Burt Lancaster pidió al estudio que despidieran al director o el se marchaba y abandonaba la producción. Gran parte de los problemas venían por el enfoque filosofico del film que quería otrorgarle Penn a la trama en donde se marcaba la relación del personaje principal con el Arte, el caso es Lancaster venía de rodar el Gatopardo con Visconti y fue un rotundo fracaso por lo que no quería verse otra vez envuelto en una película de autor que le encasillara en las malas cifras de taquilla por lo que dió ese ultimatum a la United Artist.
Al final el estudio tomó partido por el actor y despidió a Arthur Penn siendo una mancha oscura en su curriculum justo cuando empezaba, el caso y permitanme que me desvíe un segundo de la producción de esta cinta que el bueno de Penn dos años despues rodara una de las obras cumbres del cine, la prodigiosa Jauría Humana y es por eso que empiezo con aquella frase de superación personal con el ejemplo de este maravilloso actor y ahora volviendo a la reseña que nos ocupa.
Lancaster propuso cómo director a Frankenheimer con el que ya había trabajado en dos films anteriores Jovenes Salvajes y el Hombre de Alcatraz.
El caso que cuando llegó la United Artist a contratar al director, este sabiendo de la necesidad y la urgencia por parte del estudio propuso unas clausulas bastante extremas, la primera era el control total de la película y el montaje final del film, por otro lado que en los poster promocionales tenía que aparecer que la película era una obra suya siendo una clausula innegociable que el titulo sería Jon frankenheimer´s The Train, que al ser una coproducción con francia y la necesidad de tener un director frances, este no pisara el set de rodaje y por último y la petición más de primadonna que conozco junto con su salario total exigió a demás un ferrari.
El caso es que Frankenheimer le dió un enfoque totalmente diferente a la película de lo que quería hacer Arthur Penn, El bueno de John vió una pelicula de acción pura, una aventura que ocurría en un lugar tan angosto como es un tren, por lo que resultó ser un reto totalmente imaginativo para captar toda la acción que tiene este maravilloso film.
El resultado de la cinta es una película memorable, una de las mejores películas bélicas de una época en la que estaban realizandose quizá las mejores películas sobre la segunda guerra mundial al poder crear tramas con la perspectiva que da el paso del tiempo.
Frankenheimer muestra aquí su maestría filmica demostrando que a pesar de su caracter y sus peticiones extranboticas era el director ideal para esta cinta, creando una joya del cine universal que hoy en día ha quedado como obra maestra del género, por otro lado está el artifice del cambio del director, Burt Lancaster que se volcó para dar vida a Paul Labiche poniendo en peligro su integridad física al prescindir de dobles de acción en una interpretación simplemente memorable y por último el blanco y negro que reina como reminiscencia de un pasado que iba claudicando poco a poco por el color y que le da ese aspecto documental al que le sienta como un traje perfecto a esta cinta.
Y bueno, ya vamos a dar por terminada esta curiosa película del ciclo de Penn para que en un par de días nos metamos de lleno con su opera prima EL ZURDO pero que además esta reseña es un consejo de una película única con una concepción atropellada que dió como resultado una de las mejores películas belicas de la historia.
Y como para empezar con la siguiente película antes tengo que terminar esta, dejenme que lo haga recordandoos que si os ha gustado la reseña y el canal, ragalnos un like y hasta que llegue el siguiente consejo de cine sólo me quedan por hacer dos cosas, la primera desearte que seas inmensamente feliz y la segunda como no puede ser de otra forma que vivas el cine
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