Serpico Obra maestra del cine de los 70

 Bienvenidos, bienvenidas queridos amigos y amigas de Cinefilia, a ver Serpico, película que nos ocupa esta semana es hoy en día considerada una de las mejores películas de los 70, un film referente a la hora de entender una de las épocas más gloriosas del cine americano, obra de referencia y que cómo no podía ser de otro modo, película que en su momento nadie quería rodar, película que tuvo tantos problemas para ver la luz que podríamos considerar de un milagro que se estrenara y es que si la historia que nos cuenta Serpico es apasionante no lo es menos la historia de su producción.

Así que sin más dilación empecemos por comentar de que va la película, cómo siempre sin Spoiler.

Frank Serpico es un joven agente de polícia, culto e idealista que se choca de bruces no solo con la incomprensión de sus compañeros si no con la corrupción policial imperante en el cuerpo de polícia de Nueva York, a medida que pasa el tiempo y va ascendiendo, los sobornos cada vez son más importantes y resulta menos difícil seguir siendo un hombre honrado, hasta que se cruza en su camino el detective Bob Blair  que le ayudará a destapar la corrupción polícial pero con el peligro de ser ejecutado por sus propios compañeros y el resto tendrás que verlo tu, obra adictiva cómo pocas, con una trama que te va atrapando hasta dejarte enganchado a ella los 130 minutos que dura el film y hasta aquí la trama, ahora vamos a la otra apasionante historia que es la producción de este film.

La película estaba ideada para contar un acontecimiento reciente, una obra que narraba los acontecimientos que sucedieron 4 años antes cuando La comisión KNAPP que investigó la corrupción policial en la ciudad de Nueva York, pero el resultado fue la creación de una obra maestra, que ponía en valor al hombre honrado ante una maquinaria podrida, un drama policial que marco buena parte del cine de los años setenta. Todo empezó por la repercusión social que tuvo el denunciante, el patrullero Frank Serpico cuando los acontecimientos salieron a la luz y el escritor Peter Mass junto con el protagonista de la historia empezó a escribir la novela Serpico. 

Mass planeaba vender los derechos de su novela para su adaptación al cine, pero nadie quería contar otro drama policial que tan nefastos filmes se hicieron a principio de los 70, por lo que era un argumento maldito. Los primeros interesados eran Paul Newman y Robert Redford, pareja de actores que ya había destacado en dos hombres y un destino, para la realización de la película pensaron en el guionista John Gregory Dunne y cómo director Sam Peckinpah. Pero ni el guionista ni el director veían una película de interés en la historia de Serpico, por lo que los actores se centraron en otro proyecto que confluiría en la película El Golpe.

A pesar del revuelo que causó la comisión Knapp y lo famoso que era Serpico nadie quería meterse en una producción que seguramente no sería ni un éxito mediano y que se encontraría con muchas presiones políticas por parte de los responsables del departamento policial de la ciudad. Hasta que llegó uno de los mayores productores de todos los tiempos, el italiano Dino de Laurentis.

El caso es que el productor Martin Bregman si que se interéso por el film y tenía en plantilla a Al Pacino un actor ideal para interpretar a Serpico pero no tenía el dinero suficiente como para arrancar la obra y entonces es cuando De Laurentis entró en la producción haciéndose con los derechos de la novela de Mass, comenzando así la producción del film.

Para crear el guión necesitaban de un escritor que no le temblara el pulso a la hora de retratar las miserias de la sociedad del momento y Waldo Salt era el escritor ideal, hay que recordar que fue uno de los represaliados por el Macartismo y desde su regreso y sobre todo desde finales de los 60 era el guionista más controvertido del panorama Norteamericano.

Con el guionista contratado llega el momento de buscar a un director y un prometedor John G. Avilsen era el idóneo para dirigir la película. Pero pronto surgieron los primeros problemas. El guión escrito por Salt no le gustaba y amenazó con dejar la película si no era sustituído por Norman Wexler que se puso a escribir la nueva historia del caso, el problema eran los continuos enfrentamientos que tenía Avilsen con el productor Bergman, en los que siempre se saldaban con la amenaza de abandono por parte del director, esta espada de Damocles constantes realizada por el director no le gustaban a Dino el productor temió que llegara un día más avanzada la película que Avilsen avandonara. Así que entre Bregman y De Laurentis prepararon una trampa a Avilsen, una reunion donde asistirían testigos del abandono del director, la reunión orbitaba sobre el despido de wexler y la vuelta de Waldo Salt y pasó como siempre pasaba, Avilsen volvió a esgrimir el abandono de la producción para que los productores recularan, pero ese día tras decir eso, se le preparo el documento de renuncia y se le despidió.

Ahora llegaba el momento de buscar a otro director y Lumet sonó por primera vez, la necesidad de buscar un director sensato, acostumbrado a no despilfarrar fondos y que se ajustara a los tiempos de rodaje, hicieron de Sidney la única opción viable y fue contratado.

Lo primero que vió es que en principio ninguno de los dos guiones funcionaban, el de Salt contenía unos dialogos maravillosos, pero la película era densa y el de Wexter la trama era dinámica pero la narrativa era insulda, con lo que Lumet decidió rescatar lo mejor de ambos autores, la estructura de Wexler y los dialogos y el tono de Salt, creando ahora si un guion cinematográfico de primer orden.

Cuando Lumet tenía ya el guion, la estrella del reparto se había caído, tras tantos cambios de rumbo Al Pacino había perdido el interés en la obra por lo que ya estaba en negociaciones para interpretar la película Leni, pero tras llegar el director y enseñarle el nuevo guión Pacino volvió a la producción con la convicción perdida hacía tiempo y el resto es historia, un rodaje de 2 meses y un presupuesto de 3 millones de dólares al que Lumet se ajustó perfectamente nos regalaron este Serpico para gloria del cine mundial.

Esta película puedes verla en Filmin, pero si te gustan las biografías o las películas setenteras o eres un seguidor de Al Pacino, tendrias que tenerla en tu filmoteca por lo que un DVD o Blue Ray es una adquisición maravillosa.

En cuanto al resultado en taquilla fue todo un éxito sobre todo por el presupuesto tan ajustado y en cuanto a festivales y premios fue unanime el alago excepto en los Oscar que soló pudo optar como nominada a mejor actor protagonista como a mejor guion adaptado.

Y ya vamos a ir dando por terminada esta reseña, deseando que te haya gustado y si es así me regales un Like y en unos días reseñaremos el mayor film de Lumet y una de las mejores películas de la historia del cine y si no te la quieres perder, ya sabes que tienes a tu disposición el botón de suscripción por lo que si le presionas y además la campanita no te perderás nada. 

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