Bienvenidos, bienvenidas queridos amigos y amigas de cinefilia hoy con todos vosotros otro vídeo sobre rodajes imposibles, otro cúmulo de casualidades que hicieron el milagro de crear este Blade Runner de 1982.
Esta entrega del canal es una revisión de unos vídeos muy antiguos, en el que voy hacer una mejora de los mismo y compilarlos en un sólo bloque creando una visión total de cómo fue el rodaje de está mítica película de Ritley Scott, por que si pensáis que fue una balsa de aceite su creación, estás muy confundido. pero sin más dilación empecemos.
Si preguntáramos a aficionados al cine que nos dijeran 5 películas de ciencia ficción, no sé cual quedaría primero, pero si que podría asegurar que entre las 5 todos dirían Blade Runner ya que es una obra que ha trascendido al tiempo y se ha grabado por merito propio en el Olimpo del séptimo arte.
Lo que muchos no sabrán es que esta película fue un autentico milagro que viera la luz ya que se dieron tal cúmulo de casualidades y el mismo número de desdichas por lo que la película siempre estuvo al borde del precipicio y su producción fue tal caos que podríamos calificar de milagro que naciera esta joya de la ciencia ficción, así que pongan sus asientos en posición vertical, abróchense los cinturones por que este vuelo empieza aquí,.
Toda historia tiene un comienzo y está empezó en 1975 cuando Hampton Fancher un actor que había hecho carrera en la televisión recibió un dinero para escribir un guión con total libertad, hasta entonces no había escrito nada profesionalmente por lo que se tomó el encargo como un reto más personal que profesional, pasaban los días y no salía nada bueno. Un día hablando del asunto con su amigo Jim Maxwell le dijo si conocía una novela llamada ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? de Philip K Dick, Fancher contestó que no y Maxwell le dejó el libro.
Tras leerlo a Fracher no le gusto la novela, no veía nada interesante en el argumento excepto la visión de un burócrata que cazador de androides, eso le dio pie para empezar a escribir un borrador. Su principal idea del asunto era sacar dinero, por lo que se centró en una historia de género, en los años 70 el Neo Noir estaba en su apogeo y pensó en crear una trama que mezclara la novela de ciencia ficción con las películas policiacas que tan en boga estaban.
Con el borrador terminado Fancher buscó a Brian Kelly un amigo de la industria que tenía contactos con un productor cinematográfico llamado Michael Deeley.
Michael, quiso primero leerse la novela antes de juzgar si se compraba el guión o no, así que tras su lectura Deeley no vio ninguna película en ella con lo que perdió todo el interés, pero Kelly insistió en que diera una oportunidad a Fancher como guionista, explicandole que el guion escrito por este poco tenía que ver con la obra original de Philip K Dick y Deeley aceptó.
Unos días después Fancher entrego un borrador de la historia al productor, y este era un compendio de diálogos en que la trama que transcurría de habitación en habitación mas cercana a una obra de bajo presupuesto que a una película de ciencia ficción al uso y además el final del film terminaba con el suicidio de Rachel creando un final que dejaba un terrible sabor de boca.
Tras leer eso Deeley le dijo que era una basura y se olvidó del asunto quedando así la historia apunto de ser enterrada.
Hampton volvió a retomar el guion desde cero, no ya desde el punto de vista de los personajes si no de lo que más le gustó de la novela, el mundo que K Dick dibuja en su obra, un mundo en el que el ser humano está terminando con la vida en el planeta, donde los animales se han extinguido, haciendo patente la carga naturalista del libro, cosas que había pasado por alto en su primer borrador.
Tras esa re-escritura se lo volvieron a llevar a Deeley que esta vez la cosa cambió, el productor compró el guión y se puso en marcha la película.
Deeley era amigo de uno de los directivos de Filmways, necesitaba dinero para empezar la producción por lo que era crucial que la productora ayudara con la financiación y Deeley consiguió que se metiera con 2 millones de dólares.
Con ese empujón económico lo primero que hicieron era mejorar la obra con la reescritura de la trama, dando mayor fuerza a los diálogos y más profundidad a los personajes y cómo no un título que llamara al público a verla en masa y este fue "Mecanismo" una idea de Fancher, le encantaba la sonoridad que tenía y la fuerza, pero a Kelly no le convenció así que le cambiaron el título por Días Peligrosos, este título no convencía en absoluto a Fancher pero lo dejó pasar pensando que ya lo cambiaría más adelante por su potente Mecanismo.
Deeley lo leyó y decidió cambiar el título por Blade Runner, este título se lo tomó, vamos a decir que "prestado" de una novela de William Burroughs que tenia el mismo nombre
Con el guión, el título robado y la financiación solo necesitaban un director, todos pensaban en Ridley Scott para que lo dirigiera la obra, sobre todo después de haber conseguido un éxito notable con Alien el octavo pasajero.
Tras concertar una cita con él éste rechazó el proyecto, el principal motivo era que ya tenía apalabrado con Dino De Laurentis dirigir la película más esperada de la Ciencia Ficción una película que sería un referente del género y que marcaría un antes y un después en el séptimo arte, DUNE.
(Hay que decir que Dune era la máxima expectación de las producciones cinematograficas, luego pasó lo que pasó, pero eso es otra historia)
Así que Blade Runner por segunda vez se guardó en el cajón de donde pocas veces se sale.
Pero pasó el tiempo y una fatídica desgracia hizo que Blade Runner se reactivara, estamos en 1980 y el hermano mayor de Ridley, Frank, muere de cancer, esto sumió a Ridley Scott en una profunda depresión, su estado anímico se resentía y el no trabajar en ningún proyecto por que Dune se retrasaba hacía de su vida una autentica tortura, así que llamó a Deeley y le dijo que si todavía estaban interesados en que dirigiera Blade Runner y si es así que contaran con él pero con la condición de empezar de inmediato.
Como diseñador artístico contrataron a Lawrence Paul que con el presupuesto limitado y con la fecha de inicio de rodaje acercándose tuvo que trabajar a destajo.
Por mucho que el equipo de aristas avanzara y eso de avanzar era mucho decir ya que Scott era sumamente quisquilloso y estaba muy encima del proceso, los continuos problemas técnicos hacían que se acumularan retrasos.
Ya la fecha de rodaje era inminente y aún quedaban infinidad de elementos por construir, parecía todo perdido, la productora no iba a tolerar más retrasos y estaba Blade Runner a punto de su cancelación, pero el destino volvió a jugar a su favor. En agosto del 1980 el sindicato de actores y la federación americana de radio y televisión (AFTRA) empezaron una huelga por la mejora salarial, esa huelga que duró dos meses hasta el 25 de octubre, permitió al equipo técnico terminar los decorados principales para que empezara el rodaje, sin esa huelga Blade Runner no habría existido, una maravillosa casualidad de la que las grandes obras están llenas.
Todo estaba previsto para empezar, ya no había nada que pudiera entorpecer el rodaje pero como el destino es caprichoso, hizo que la productora principal de la película Filmway entrara en banca rota, no había dinero para pagar a nadie y los decorados secundarios aún por terminar. La cosa pintaba mal, así que empezaron a buscar inversores, a los primeros en contactar fueron la MGM y la UA que declinaron meterse en el proyecto, recordar que entonces la película más esperada en el género era Dune, de la que se suponía que iba a ser otro rompe taquillas como Star Wars. Nadie quería enfrentarse a ella, así que recurrieron a Alan Ladd Jr. por aquel entonces manager de la Warner, Ladd ni se lo pensó... preguntó sobre la película y puso 7 millones de dólares sobre la mesa, solo cubría la mitad pero les permitía pagar facturas y seguir adelante. El resto del dinero lo pusieron dos productores televisivos que se quedaron con la tajada de las televisiones y el cine doméstico y esos productores fueron Perenchio y Yorkin.
Por cierto una anécdota de los decorado, muchos de los interiores fueron rodados en la casa Ennis una extraña mansión de los Ángeles tan particular y cinematográfica que tiene el privilegio de ser la autentica mansión encantada en House on haunted hill que protagonizara el grandisimo Vincent Price.
Poco a poco el ambiente se fue enrareciendo entre el equipo, los actores y el director pero lo peor de todo era el retraso que se empezaba a acumular.
Aun así la película sigue adelante, los actores hacen su trabajo y el equipo técnico asume las estridencias de Scott para crear las puestas en escena, a pesar de que el ambiente no es el idóneo la cosa fluye, pero hay algo que va a romper ese equilibrio de fuerzas, los productores televisivos Perichio y Yorkin, hay que explicar que Yorkin era director de algunas series de TV y del Show de Andy Williams, se presentan en el set de rodaje con el fin de ver que es lo que causa los retrasos, tras ver trabajar a Scott y verle repetir tomas una y otra vez, los productores creen que Scott es el problema.
Éstos empiezan a ir cada vez más a los rodajes y comienzan a meter prisas a Ridley que les trata con total desdén, cosa que los productores televisivos no toleran.
La verdad es que la película se estaba retrasando pero lo normal en cualquier producción tan compleja como lo era Blade Runner, tras las presiones de Perichio y Yorking, Ladd Jr se pasó por el rodaje y le comentó que la película se tenía que terminar, Scott entendió las presiones a la que Perichio y Yorkin estaban sometiendo a Ladd y a Deeley y si el propio Alan Ladd le decía eso era por que algo escondían los productores televisivos, así que los últimos días se rodó con urgencias, no se pudo dar la perfección que Scott imprimía a toda la película incluso dejando errores garrafales que manchaban la obra como el plano en el que Zhora rompe los cristales y se nota la peluca del doble.
Aún así terminan el rodaje, Scott se dio unos días de descanso antes de empezar a montar la película, en principio había terminado lo peor, pero como siempre en esta película hay algo o alguien que lo vuelve a liar, resulta que aprovechando que Ridley estaba en Inglaterra, Perichio y Yorking junto a sus abogados preparan una carta de despido a Scott por sus retrasos, esta carta llega al resto de los socios, Ladd y Deeley, esta fue la gota que colmo el baso de la paciencia de Ladd Jr y se presento ante los productores y les dijo que él y la Warner han pagado por una película de Ridley Scott y que el despido no se haría efectivo.
Yorking que era el que había movido todo para dirigirla él , todavía guardaba un as en la manga.
Scott llegó y empezó el montaje, el primer visionado no gustó pero el siguiente es una maravilla de sutilezas, de conceptos, donde dejan claro que Decard es un replicante, esto lo vemos cuando Decard en un momento sueña con un Unicornio, un sueño que nadie puede saber pero que al despertar Gaff ha dejado un unicornio de papel, demostrandole que sus sueños son programaciones enfocadas a creerse humano. (No me digáis que no es una maravilla).
Perichio y Yorkin no entendieron nada, le pidieron a Scott una voz en off que narrara los pensamientos de Deckard pero este se negó.
Cuando por fin terminó el montaje con la magnifica música de Vangelis y presentó la obra con más de 2 horas de duración, Yorkin y Perichio saltaron con una clausula del contrato en el que decía claramente que si la película duraba más de dos horas ellos podían editarla, así que con la película terminada Scott y montada por el y que hoy se puede ver originalmente en BLADE RUNNER DIRECTOR´S CUT, Yorkin remontó la obra, metió la voz en off que personalmente odio y creó un Happy End que rompía con toda la estética que Scott había creado y lo peor de todo, sin criterio, durante todo el film vemos coches voladores en la ciudad nocturna y al final de la película vemos un coche rodando por una carretera luminosa. Un sin sentido que hasta 20 años después no se pudo tocar por los derechos que tenían Yorkin y Perchio sobre la obra.
Aún así, incluso mutilada por los dos productores televisivos era una buena película, el primer día de estreno fue prometedor la gente acudió en masa a verla, pero al día siguiente las críticas fueron demoledoras, tanto que acabó siendo un desastre en taquilla, pero un desastre relativo, era cierto que el gran público le dio la espalda pero en los cines de reestreno se mantenía año tras año, se empezaron a crear club de fans del film, algo que solo se había conseguido con Star Trek y Star Wars y ninguna más y esto hacía que Blade Runner se mantuviera en cartel mucho más que la mayoría de Blockbuster y que termnara su vida en salas cómo un clásico, como una obra de culto.
Podemos decir que fueron los aficionados los que salvaron la película y Blade Runner vive y existe por esos aficionados que supieron ver donde los críticos cinematográficos cerraron sus ojos
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