viernes, 28 de enero de 2022

Barry Lyndon

 Bienvenidos, bienvenidas, queridos amigos y amigas de CINEFILIA hoy vamos a reseñar una obra maestra atemporal, una de las 10 mejores películas de la historia y dirigida por uno de los grandes genios de la cinematografía.



Hoy vamos a reseñar Barry Lyndon de Stanley Kubrick.

Cuando nos enfrentamos a una película que es un referente no solo de la narrativa si no de la técnica solemos ir con miedo, obras densas en las que solo los iniciados pueden apreciarla y entenderla, pero señores en este caso no es así ya que hablamos de una comedia brutal y que llega a la carcajada en algunos momentos. Al final del vídeo os diré una escena de la película no puedo verla sin llorar de la risa, pero antes de analizar la película vamos a contar un poco de la trama.

La película nos narra el nacimiento, ascenso y declive de Barry Lyndon un joven huérfano irlandés que pierde a su padre por un duelo a causa de unas cabezas de ganado, cuando el joven Barry se hace mayor es adentrado en las artes amatorias por su prima de la que cae perdidamente enamorado, otra cosa diferente es la prima que a las primeras de cambio le remplaza por un oficial inglés de gran fortuna, Barry despechado reta a un duelo de pistola a dicho oficial causándole la muerte en el enfrentamiento por lo que tiene que huir para no ser encarcelado.

Sus aventuras le llevarán a la guerra de los 7 años a vivir como soldado, agente encubierto y tahúr de cartas hasta llegar a casarse con una noble y ser recibido hasta por el Rey, el problema es que todo lo que sube baja y el bueno del Sr. Lyndon no va a ser menos.

Kubrick estaba terminando la naranja mecánica y ya empezaba a preparar su siguiente obra, una película sobre la figura de Napoleón Bonaparte, el problema fue que mientras el preparaba la preproducción, Sergei Bondarchuk estrenó Waterloo, película que ya reseñamos en el canal y que al final del vídeo os enlazaré por si queréis ver la reseña. El caso es que Waterloo no llegó a ser un éxito y cualquier obra sobre el dictador francés era una mala idea, así que sin dejar el cine de época se fijó en una novela, llamada la Suerte de Barry Lyndon escrita por William M. Thackeray y sus golpes de humor cautivaron a Kubrick que compraron los derechos y empezó la producción,

 Kubrick era un maníaco de la interpretación y quería que Barry fuera un hombre comedido de grandes deseos y pasiones que se guardaba para él, esa complejidad actoral necesitaba de un interprete de primera por lo que se valoraron varios nombres, Al Pacino, Jack Nicholson, Robert Redford e incluso Clint Easwood sonó para el papel, pero al final se lo llevó Ryan O´neal, hay que decir que escoger a O´neal  fue todo un acierto, está perfecto en todo momento, su progresión en la interpretación según va cumpliendo años el personaje es de una dificultad máxima que resuelve de una forma magistral, trabajo que pasó inadvertido en la academia de Hollywood como no podía ser menos ya que ni siquiera estuvo nominado.

La idea de Kubrick era hacer una recreación naturalista de la historia en donde la fotografía tendría un peso monumental en la misma trama, Para ello contó con John Alcott, por cierto si no lo sábeis Alcott es ese jugador dormido que aparece en este plano. El trabajo de Alcott es soberbio, no solo por que retrata unos exteriores dignos del genio que es, si no por que tubo que aprender sobre la marcha un nuevo sistema de filmación para interiores y aquí quiero hacer un paréntesis. Alcott no tuvo que aprender a usar una cámara ya existente, si no que tuvo que aprender a usar un artilugio jamás usado antes. Kubrick quería que los interiores estuvieran iluminados por velas, sin ningún tipo de apoyo de luz más que las propias llamas de los candelabros, eso era imposible en aquella época, pero el se había enterado que la Nasa tenía unas lentes Zeis creadas para rodar en condiciones de extrema oscuridad, con lo que pidió aquella lenta que era un 50mm.

Para el cuerpo compró una cámara Mitchell sin visor reflex y pidió al ingeniero Ed di Gulio que fabricara un adaptador para poder adaptar la Zeis comprada a la Nasa, no solo eso, si no para tener mejores aperturas pidió que se fabricara un adaptador que pasara de 50mm a 35 y con semejante artilugio Alcott hace una de las fotografías en interior más sobrecogedoras del cine, mi eterna admiración y cierro el paréntesis.

Cómo es normal se llevó el oscar a la mejor fotografía pero es que si no se lo lleva creo que el desprestigio habría sido brutal para la academia.

La forma en la que nos sitúa Kubrick en cada lugar de la historia lo hace de una forma pictórica, durante momentos parece que estemos observando un cuadro y la forma de conseguirlo es con la ausencia total de movimientos de cámara y cuando es imposible dejarla estática sus travelling son lentos y pausados de tal forma que el espectador no sea consciente de este.

Para poder contar los acontecimientos sin hacer insertos de historias y poder dejar así el plano más tiempo usó el recurso del narrador al que pone voz el siempre eficaz Michael Hordern, por Dios que actor, de toda su carrera me quedo con el telfelim que hizo en la BBC de la tempestad, simplemente Arte con mayúsculas, pero volviendo a la película.

Su fotografía y puesta en escena se adereza con unas actuaciones espectaculares y aquí quiero destacar la valentía de Kubrick a la hora de apostar por Marisa Berenson, Marisa era una modelo que había hecho algún papel secundario en Muerte en Venecia y en Cabaret y el único papel protagonista que había realizado fue en una pequeña película italiana llamada Un Modo di essere donna Un drama romántico de poco recorrido, por cierto la película no es nada del otro mundo pero su banda sonora a cargo de Piero Piccioni es maravillosa, por cierto Piccioni es de esos compositores que fuera de Italia es desconocidisimo y es una injusticia, por que es de los mejores compositores de BSO de la historia, pero  bueno, volviendo a Barry Lyndon, algo vio Kubrick en ella que la dio el papel de la condesa y tengo que decir que está maravillosa en todo momento.

Ahora viene el momento de decirte esa escena tronchante, para mi hilarante, tranquilos que no os voy hacer spoiler de ningún tipo, así que la vais a disfrutar a más no poder, pero antes quiero contarte donde puedes ver la película. La tienes de momento en HBO Max, ¿por cuanto tiempo? no lo sé pero si eres suscriptor del canal te ha llegado a tiempo esta reseña para disfrutarla, si no lo eres y has llegado en otro espacio temporal y ya no la tienes disponible, lo mejor que puedes hacer es suscribirte y así no te perderás ninguna reseña de las películas que recomendamos para que disfrutes de tu semana.

Y ya ha llegado el momento. Barry Lindon ya mayor recibe la visita de un joven dispuesto a enfrentarse en un duelo a pistola con él, es Lyndon que ya ha vivido toda una vida de peligros y ese joven se enfrentan bajo la sombra de unas ruinas. Pues bien, ese momento es simplemente BRUTAL, tiene un humor negrisimo que te va hacer reírte de la posible muerte de uno de ellos. Evito para no hacer espoiler desvelar ni que pasa ni quien son cada uno... pero creerme que os va a colmar con creces que os haya dejado con la intriga.

Y ahora os dejo con la posivilidad de dos vídeos, uno es ver la reseña de Waterloo que os comenté al principio y otra un vídeo explicativo del final de 2001 una odisea en el espacio contada por baca de Kubrick

Y ya solo me queda desearte que seas muy feliz y que vivas el cine




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