Rocky

 Bienvenidos, bienvenidas queridos amigos y amigas de Cinefilia hoy con todos vosotros una película de la que todo el mundo ha oído hablar pero no tantas personas han visto,  Rocky la película que resultó ser el origen de una saga pero que es una obra con entidad propia y que se aleja de sus secuelas tanto que parece una obra irreconocible a medida que pasaba el tiempo y el numeral en su título.

Rocky es un drama de superación, de redención y de amor aderezado con el mundo del pugilismo que tan buenas obras nos ha dado, muy  bien dirigida huye de los estereotipos para crear los suyos propios y eso es gracias en parte a que este primer film lo rodó John G. Avilsen el mismo que años después rodara Karate Kid y sus secuelas, que tomó el reto de dar vida a una obra creada y escrita por un joven Silvester Stallone que hay que recordar que estuvo nominado ese año al oscar como guionista por esta misma película.

La obra retrata al típico boxeador don nadie, aún es un prospecto que pelea en tugurios de mala muerte y que tras la retirada del aspirante oficial al título se encuentra ante la oportunidad de su vida al ser nombrado él el sustituto para esa pelea y ese cambio tan radical en su vida hace que ahora todos los que le habían dado la espalda quieran subirse a la ola que representa Rocky, todos no por que Adrian, la chica de la tienda de máscotas le sigue viendo el matón amigo de su hermano al que no le da cancha.

Y si crees que sabes lo que va a pasar sin verla estás muy equivocado, esta cinta tiene un guion brutal y la nominación al oscar es francamante merecida pero aparte de todo eso, si alguien llegó a tocar el cielo con esta obra además de Stallone, ese fue Bill Conti que era un casi desconocido y que por su trabajo aquí estuvo también nominado al Oscar, aunque no es de extrañar por que la obra obtuvo hasta 10 nominaciones y ganó, mejor montaje, dirección y película.

Y es que este film es demoledoramente sensible, maravilloso, tierno y emocional, donde Stallone hace el mejor papel de toda su carrera, hay que decir que Stallone creo el guion para protagonizar él a su protagonista, el problema es que el único que estuvo interesado en rodar el film era Irwin Winkler y su socio Robert Chartoff, productores de obras como A quemarropa del 67 o El jugador del 74 con James Caan como protagonista y  al que veía representando el papel del potro italiano o semental italiano como sería la traducción real.

Stallone no estaba deacuerdo y le ofreció a Winkler una oferta que no podía rechazar, no cobraría nada por el guion si él representaba al protagonista y Winkler ante tal oferta no pudo más que aceptar la y con algo menos de un millón de presupuesto arrancó la producción, hay que decir que el presupuesto estimado del film cuando lo cogió la United Artist era del doble, pero el protagonista tenía que ser una gran estrella Robert Redford, Ryan O´neil o Burt Reynols pero al comentarle los productores que tenía que ser Stallone, estos lo dejaron en la mitad, pero el recortar el presupuesto no supuso una merma ya que el año del estreno 1976 este film fue el más taquillero llegando a recaudar casi 118 millones de dólares.

Al final el éxito permitió a todos montar una carrera solida, pero el mejor parado fue Stallone, jamás el perder dinero fue tan rentable a largo plazo, tras eso Silvester decidió hacer una secuela pero esta vez escrita y dirigida por él y alguno os sorprenderéis descubrir que Stalone tiene una carrera bastante notable como director en el que además de Rocky 2, rodó La cocina del infierno, Rocky 3, la secuela de fiebre de sábado noche que se llamó La fiebre continua, Rocky 4, Rocky Balboa, Rambo 4 y los mercenarios.

Pero nada en su filmografía no como actor, no como director ni como guionista pudo superar aquella pequeña joya llamada Rocky y que hoy es un símbolo universal